Nemesis 3 (1996) Un gran lapsus

Cuando Imperial le dió luz verde y los fondos a Albert Pyun para la secuela de Nemesis, Pyun realizó una película inferior a la original, pero coherente en la historia que contaba y aun entretenida. Pero con escenas sobrantes de la película, más algunos magros fondos arañados para nuevas escenas, realizó una tercera parte: "Nemesis 3: Time Lapse", que como el título bien dice, fue un gran lapsus.

La historia arranca con el envío de un nuevo cyborg desde el futuro, para cazar a la Alex que encarna Sue Price. Ya desde el vamos vemos un intento de atar algunos cabos con la primera película: a Alex (que en la II había crecido en una tribu africana) ya se le agrega un apellido (que sin más ni menos es el mismo del antihéroe de Olivier Gruner en la original, con lo que basicamente, es un clon con el sexo cambiado) y el cyborg enviado tiene un nombre muy poco original: Farnsworth II, como si fuera el sucesor del villano de la primera película, encarnado (como en la primera) por Tim Thomerson.

Volvemos al presente y vemos a Alex despertándose en medio del desierto, con un balazo en la cabeza, amnésica y con dos tamaños pistolones a sus costados. Con todo esto a cuestas, y mucho diálogo interno, la chica empieza a deambular por el desierto hasta que encuentra a... Farnsworth II, quien intenta confundirla aun más.

Intentar seguir hablando del argumento es algo complicado porque el argumento en si... es bastante revuelto. Pero se puede mencionar que aparecen otras humanas genéticas (¡hermanitas de Alex!), algunos mercenarios, unas payasescas mellizas cyborg, una sórdida carrera contra el tiempo, unos vestuarios vergonzosos, unos flashbacks inentendibles y unos efectos especiales muy malos.

A Sue Price se la ve un poco más suelta en pantalla, aunque la ayuda poco la historia. Como si fuera compensación, esta vez tiene un poco más de apoyo actoral. Norbert Weisser (actor fetiche de Pyun, dúctil en muchísimas películas de él, y reciente descubridor del corte del director de Ticker) encarna a Edson, un mercenario que solo intenta seguir vivo. El ya mencionado Thomerson toma el lado más risueño de su Farnsworth, dejando de  lado ese dejo siniestro que tenía, y lo exacerba a niveles insoportables. Lo mejorcito viene de parte del francés Xavier Declie, uno de los pocos (sino el único) que podrá agregar esta película a su CV sin sentir algo de vergüencita, como Johnny, un mercenario que recibió un balazo en la cabeza y quedó con un retraso mental.

El resto del reparto es nulo actoralmente. Earl White encarnó en la 2 a Juma, un aborigen que perdía una batalla con Alex, y aquí repite presencia como un mercenario llamado Brick (¿Bardo?). Pyun tambien lleva a un punto límite su fascinación por las gimnastas en esta película: además de Price, incluye a las fisicoculturistas Debbie Muggli, Sharon Bruneau y Ursula Sarcev, todas como cyborgs.

Con tanta ensalada, uno no alcanza a comprender Nemesis 3 hasta el final. Y si para entonces uno entendía poco sobre que ocurría, llegado el momento entiende todavía menos. El anuncio y una promisoria escena de una "Nemesis 4" es lo único que trae un dejo de expectativa respecto de la secuela.

Nemesis 3 no fue editada en Argentina, ni en video ni en DVD. Desconozco si tuvo alguna emisión por cable, pero no me sorprendería que I-Sat o Space la hayan pasado.

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(enlace actualizado 2014)

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